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La secretaria autonómica de Eficiencia y Tecnología Sanitaria, Concha Andrés, ha asumido que habrá «un parón» en la reducción de las listas de espera, que habían comenzado a recuperarse tras la desescalda, por el incremento de ingresos de Covid, que ya ocupan el 30% de las camas UCI, ya están en fase 3, con un total de 117 pacientes, frente al 5%, fase 1, «en la que estábamos hace muy poco», lo que ya ha obligado a algunos departamentos a reducir las operaciones no urgentes.

Al respecto, Andrés, en su comparecencia en la comisión de Sanidad en las Corts, ha avanzado que septiembre cerró las listas de espera con 61.127 pacientes, frente a los 61.689 de agosto, y una demora media de 151 días, seis días menos que el mes anterior. No obstante, ha recalcado que «el futuro es incierto» porque la pandemia puede hacer «cambia mucho las circunstancias de hoy para mañana» pero ha confiado en que con el Estado de alarma y las nuevas medidas adoptadas se pueda «normalizar la situación y recuperar poco a poco el ritmo de actividad quirúrgica como lo estábamos recuperando» antes de la llegada de la segunda ola.

Así, ha recordado que se han conseguido aumentar la capacidad de las camas UCI de las 400 a las 900 y tras «la interrupción total» con el Estado de alarma de las operaciones, salvo las urgentes no demorables, a principios de junio comenzaron a recuperarse las pruebas diagnósticos y las intervenciones.

Andrés, que ha recalcado que la Comunitat es de las pocas autonomías que ha publicado todos los meses las listas de espera con «gran esfuerzo», ha explicado que «la preocupación» de la conselleria al abordar las listas tras este parón, y que se plasmó en unas instrucciones, era «revisar la situación clínica de los pacientes» porque «hay veces que una patología puede ser leve pero para una persona puede ser invalidante», como lo es una catarata para un camionero porque le impide trabajar.

Por ello, a estos casos se les dio le prioridad clínica para ser intervenidos por delante de pacientes con más demora. Además, en estos meses se ha combinado las operaciones que necesitaban hospitalización con la cirugía mayor ambulatoria a través del programa de autoconcierto.

El resultado, ha recalcado, es que en el tramo «más importante», el de una espera de 180 días en el que había más de 30.000 personas, los que estaba en prioridad media o alta ya están operados y «si nos deja la Covid, ahora se intervendrán a los que llevan más tiempo pero con una enfermedad clasificada como menos invalidante».

En concreto, las intervenciones realizadas en febrero a las personas con prioridad 1 suponían el 10% y en septiembre aumentaron hasa el 16% con lo que los que siguen en el tramo de espera de más de 180 días, 31.408 pacientes, son ya de prioridad baja.

De este modo, se ha logrado reducir la espera entre julio y agosto en 10 días cuando el verano pasado aumentó en 16 días. Además, ha recalcado que las listas de espera «no se cerraron» y se incorporado cerca de 35.000 personas de junio a agosto y 12.840 en septiembre.

El 70% de las lista de espera está integrada por pacientes de cuatro patologías, solo la enfermedad de catarata supone 16%, y en su mayoría vinculada a traumatología. En septiembre se realizaron 22.997 intervenciones de listas de espera y se ha llegado a un índice de cirugía ambulatoria similar al año anterior, un 59%.

Plan de autoconcierto

Andrés ha destacado que además del Plan Óptima se mantienen reuniones periódicas con todos departamentos para «consensuar los autoconciertos, en el que se han incorporado técnicas de dolor –65 pacientes– y cirugías plásticas –41 mujeres con cáncer de reconstrucción de mama–.

Además, en el plan de autoconcierto se ha realizado en la primera quincena de octubre 715 intervenciones, el doble que en septiembre. El 48% de los operados por autoconciertos son los que estaban esperando más de seis meses.

Respecto al personal, ha destacado que de los 128 profesionales extra comprometidos para este plan solo no se han podido contratar 12 facultativos porque las bolsas se han agotado por la pandemia y en este sentido ha recordado que en total por la Covid se han contratado un total de 7.000 profesionales.

Asimismo, ha destacado que también se ha puesto en marcha un programa de extraconcierto que supone establecer un distrito único de modo que los pacientes que accedan se operen a otros departamentos con menor espera o que sean los propios especialistas los que se desplazan.

Plan de choque

Asimismo, respecto al plan de choque ha concretado que en el cuarto trimestre de 2019 se seleccionaron a 8.430 personas, y en el primer trimestre del año a 8.564, en el segundo a 7.992, y en el tercero se han seleccionado a 6.628 personas. De ellas, 16.009 personas ha aceptado hasta septiembre frente a las 14.980 del año pasado.

Andrés ha explicado que para potencia el plan de choque , entre otras medidas, se ha puesto en marcha un plan de gestión centralizada de llamadas para ofrecerlo de forma individualizada. En total se han realizado 5.446 llamadas, de ellas 2.803, el 51,5%, han aceptado y 2.226 lo han descartado bien porque quiere que sea el médico que les ha llevado, porque ya no quiere operarse, porque ya lo han hecho por seguro privado o porque aún están incluidos por un fallo administrativo.

Nuevo colapso

Por su parte, el diputado popular Juan José Zaplana ha cuestionado cuantos muertes por otras enfermedades ha habido durante la pandemia y ha augurado que habrá un nuevo colapso con esta segunda oleada, la diputada de Cs Yaneth Giraldo ha replicado que las acciones han sido «muy poco eficientes», y le ha acusado de «decisiones sectarias» por no mantener el modelo de gestión privada de Torrevieja que tiene «mejores listas de espera» que Alzira tras la reversión. El diputado de Vox, David García, ha coincido en que la reversión de Alzira ha sido «un fracaso» y ha criticado que «la imposición del requisito lingüístico» mermará los médicos «cuando más falta hace».

Por contra, desde Unides Podem, Irene Gómez Unides, ha destacado que la Comunitat «no ha parado ni un minuto para mejorar la atención, desde Compromís Carles Esteve ha señalado habrá que adaptar el Plan Óptima 2020-2023 a la realidad y desde el PSPV Carmen Martínez ha lamentado que algunos les moleste que los datos de la Comunitat sean «mejores» y ha señalado que las listas de espera «nos acompañarán mucho tiempo por desmadre y recortes de tiempo anteriores».

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